Comentario: Los mejores arroces de Madrid. El arroz es el hilo (grano) conductor de vidas, familias y momentos para compartir de valencianos y levantinos en general. Alrededor del grano toda una cultura gastro: todo lo que se cuece en una paella o va a su alrededor, emerge del agua salada o dulce de la albufera. José Luis García Berlanga, hijo del mítico director de cine, representa esa pasión de los valencianos, autodidactas casi todos y apasionados por bordar el arroz. Si un no profesional, ya con cierta edad, pone una arrocería, es que está muy seguro de su capacidad. Los cocineros profesionales saben mejor que nadie, que ser arrocero no es nada fácil. Quizás fue la llama que encendió la idea de este proyecto, que nació en plena pandemia a finales del 2019. Atractivo y luminoso restaurante frente al Retiro: amplias cristaleras, el calor de hogar una librería, tonos blancos y claros y mesas vestidas con amplitud de espacio entre ellas. Tienen una pequeña terraza en la acera, para cuando el tiempo es amable.

Especialidades: Vamos al grano: aquí se viene a comer arroz y algunas raciones o platos para compartir, mientras llega la gramínea. Utilizan la variedad albufera de productores locales de La Albufera, una de las que mejor transmite el sabor, aunque es una de las más frágiles. Diferentes sofritos y caldos que transmiten su personalidad y valores suaves. Elaboran sobre todo arroces en paella, secos y de capa fina los más ricos y deseados: sueltos, nada grasientos y de sabores poco intensos, pero que buscan el equilibrio con la personalidad del resto de ingredientes. En cualquier caso, si le gustan los arroces sabrosos, este no es su restaurante. El más solicitado, el senyoret. Los fundamentales, el abanda y la paella valenciana tradicional con su pollo, conejo y garrofó. Hasta una decena diferentes, entre ellos: el de bogavante, el negro o el de carabineros. Casi todos exigen solicitarlos “por encargo”, al concretar la reserva. Para compartir por delante: la coca mallorquina, alcachofas confitadas en su época, esgarraet clásico, con berenjena asada, pimientos y cebolla. Pamboli de sobrasada mallorquina, boquerones fritos y las clásicas clóchinas. Estos son los argumentos para llegar airosos al arroz. De postre, torrija brioche y tarta fina de manzana, más que correctas. Los mejores arroces de Madrid.