Comentario: restaurantes casa de campo terraza. Un día con buen tiempo, picotear unos platos, compartir una copa de vino mirando al palacio real y al lago de la Casa de Campo, es una delicia. Y todo ellos, sin salir de la ciudad, en uno de los mayores parques de Europa. En 2019 los Grupos Triciclo y The Hat, se quedaron con la concesión de un par de quioscos y crearon un restaurante amplio, con dos tipos de terrazas: una formal, con suelo de tarima y manteles, y otra más de verbenera, con mesas informales, suelo de piedras y sombrillas. Carta fácil y reconocible, pero bien hecha en términos generales. Quizás algún pequeño fallo ¿de comienzo de temporada? Pero son profesionales reconocidos y lo hacen bien. Dispone de menú infantil. Buena selección de vinos en una bodega de 60 etiquetas y una docena de ellas por copas.

Especialidades: Un picoteo para compartir y algo a la brasa, puede ser el camino. Estupendo y fresco el ceviche nikkei de pescado salvaje con aguacate. Empanada de bacalao y pasas. Pochas con codorniz. Les fabes frescas con habitas del Maresme y guisantes, un plato de elementos “descosidos”, sin ensamblar; al menos el que comimos nosotros. Croquetas de jamón. Revolconas con oreja, excelente ésta, pero desproporcionado el pimentón de las revolconas. Callos a la madrileña. El canelón de rabo, salsa de setas y pecorino trufado, es un plato que está en la carta desde sus comienzos. Saborazo de la fideuá, del rossejat de marisco con alioli, perfecto de punto. Y las brasas, la parrilla, que es parte del fundamento de la casa y cuenta con la experiencia acumulada de su restaurante asador Sua. Pescados salvajes: rodaballo a la brasa, merluza, lubina, pulpo. Carnes: lomo bajo europeo y chuletón de frisona gallega.  De postre, arroz con leche estilo asturiano y chocolate con pan y aceite de oliva virgen. restaurantes casa de campo terraza