Comentario: Restaurantes Sierra Guadarrama Madrid. El serrano y desconocido Noroeste de la Comunidad, se ha convertido en un destino gastronómico de fin de semana, algo casi inimaginable. Pequeño pueblo que linda con Ávila, es uno de los más altos de la sierra de Madrid (1420 m.). Espectacular entorno que se accede por el puerto de La Cruz Verde, cercano a El Escorial. Monte monte, árboles centenarios, granito sobre la hierba y viceversa... riachuelos entre piedras verdes y unas grandiosas vistas no vistas. El restaurante, una casa de pueblo convencional, que cobija a los que han llegado a pasar el día por estas tierras de la Sierra de Guadarrama. Lo regenta una familia dedicada a la restauración Pablo Barrera, que ha tenido diversos locales en Madrid. Decoración cálida y rural, dos chimeneas, sencilla terraza veraniega, servicio eficaz a cargo de padre e hijo, cuando en la cocina están madre e hijo: Pablo, con experiencia en Ritz, Príncipe de Viana y El Amparo, es la 4ª generación de la familia Barreda Benito, y añade chispazos rupturistas a la cocina tradicional de su madre.

Especialidades: Cocina honesta, sencilla, con interés por hacerlo bien, para que vuelvan, claro. Si hace buen tiempo, unas mesas en el exterior pueden ser el comienzo de una gran amistad: buenas chacinas ibéricas, una morcilla bien especiada o unas croquetas de jamón cremosas y sabrosas. Dentro, una barra y arriba, el cálido comedor de paredes de piedra. En el plato, recetas tradicionales cocinadas con buen punto. Sus especialidades las marca el terreno. Setas variadas, las de cardo a la plancha las mejores, junto con el boletus, otro de los fijos en el pedido. Alcachofas fritas correctas, ensalada de corujas o berujas con tomate. Las patatas revolconas… uuuff! Repetimos: las patatas revolconas con torreznos… pordioosss... pordioossss... no se las pierda. De carnes, están ricos los rollitos de cabrito estofados con ensalada de fresa. Y jugoso y bien asado, el cabrito lechal de la zona. Siempre lechales pequeñitos, muy deseados por los clientes. Si no le gusta el asado, las chuletitas del mismo animalito, son magníficas. Dos postres muy buenos: soufflé de turrón (coulant) y tarta de limón con confitura de mandarina. También torrija y pastel de manzana y plátano. Recomiendan reservar el asado previamente, en fines de semana. Restaurantes Sierra Guadarrama Madrid.